Enrutamiento estático vs dinámico

Qué es enrutamiento

Antes de adentrarnos en los tipos de enrutamiento existentes y las diferencias fundamentales que tienen entre ellos, es imprescindible conocer el término enrutamiento. Este es muy utilizado en las redes informáticas en la actualidad debido a la importancia que su uso conlleva.

Lo primero que debemos preguntarnos es en qué consiste enrutar. Para que dos redes puedan comunicarse entre sí es necesaria la existencia de un dispositivo intermedio que tenga la capacidad de transmitir los paquetes de unas redes a otras. Estos son los conocidos como routers.

La función principal de los routers es la de buscar el mejor camino, entre los posibles, hacia un destino para dirigir tráfico de datos hacia él. Para llevarla a cabo utilizan tablas de enrutamiento que contienen información sobre las redes que están conectadas directamente al router, además de las rutas hacia otras redes.

En las redes existen muchas vías distintas para llegar a un mismo destino. Para elegir una de ellas se debe definir qué se entiende por “mejor ruta” y cuál es la métrica que se va utilizar para medirla. Haciendo una analogía con un ejemplo de nuestra vida cotidiana, se podría decir que, si estamos en nuestra casa y queremos llegar al supermercado, tendremos varias opciones o caminos para poder hacerlo, y elegiremos el que más nos convenga basándonos en diferentes criterios (métrica).

La métrica es un parámetro que mide un cierto valor, y en base a él, el router decide si dirigir el tráfico por un camino u otro (ejemplos: número de saltos, retardo, velocidad, carga…). La métrica más utilizada es el número de saltos, es decir, elegir la ruta que pasa por el menor número de nodos.

Es muy importante tener en cuenta que los routers nunca van a tener información acerca de todas las redes existentes, sino únicamente de aquellas que por la configuración (dinámica o estática) le hagamos conocer y pueda mantener en su memoria.

Qué es enrutamiento estático

El enrutamiento estático es aquel en el que el administrador de la red debe encargarse de configurar manualmente cada uno de los routers que forman la misma. Cuando se lleva a cabo este tipo de enrutamiento hay que acceder a cada router, configurarlo individualmente y enseñarle cada una de las rutas existentes.

Este tipo de enrutamiento hace más fácil el mantenimiento de las tablas de enrutamiento en redes muy pequeñas, en las que se sabe previamente que no va a haber un aumento significativo de la misma. Normalmente, utiliza una única ruta por defecto o predeterminada que es la que dirige el tráfico hacia cualquier red que no tenga coincidencia con otra ruta de la tabla de routing.

Por lo indicado anteriormente, el enrutamiento estático se utiliza principalmente en redes con una cantidad pequeña de routers, las cuales tienen un solo gateway. Cuando se lleva a cabo este tipo de configuración, hay que especificar en cada router la IP de destino, la IP del router por la que se envían los paquetes, la distancia y la máscara de red.

Qué es enrutamiento dinámico

El enrutamiento dinámico se basa en la utilización o empleo de protocolos de enrutamiento con el fin de automatizar el intercambio y la actualización de las tablas de enrutamiento de cada uno de los routers. Estos protocolos comparten las tablas de enrutamiento de forma automática con los routers cercanos, lo que hace que su utilización sea recomendada para redes grandes.

Si tenemos una red en la que utilizamos este tipo de enrutamiento, no importará la cantidad de routers que contenga, ya que podremos ir agregando en ella nuevos equipos y automáticamente todos los routers los conocerán sin necesidad de configurar cada uno de ellos de forma individualizada. Todo es automático, por ejemplo, si elimino una red WAN o LAN todos los equipos sabrán que no existe y no enviarán paquetes a la misma. O si por el contrario, la agrego, todos la conocerán y podrán comunicarse con ella.

Es fundamental comprender que, en este caso, los routers se comunican unos a otros las redes a las que están conectados, lo que lo hace mucho más rápido y eficiente.

Enrutamiento estático vs dinámico

A lo largo del presente apartado se describirán algunas de las características fundamentales de cada uno de los tipos de enrutamiento (estático y dinámico), para conocer cuando debemos utilizarlos.

El enrutamiento estático se hará más complejo de configurar cuanto mayor sea el número de equipos que posee la red que estamos creando. Además, el número de comandos y el cuidado que se debe tener para no generar bucles o rutas que no lleguen al destino se ve en aumento al ir introduciendo nuevos equipos o redes. En cambio, el enrutamiento dinámico no incrementa su complejidad dependiendo del tamaño de la red.

Para implementar un enrutamiento dinámico es necesario tener unos conocimientos muy avanzados en redes informáticas, es decir, se debe conocer cómo funciona el algoritmo del protocolo de enrutamiento que se va a utilizar y la red al completo. Por el contrario, cuando utilizamos enrutamiento estático no se requieren conocimientos avanzados.

En cuanto a la escalabilidad, el enrutamiento dinámico debe implementarse en aquellas redes en las que exista una proyección de crecimiento ya que se irá adaptando de forma automática conforme la red vaya creciendo. Pero el enrutamiento estático no es adecuado en las topologías grandes porque demandará mucho trabajo en la red. Por ejemplo, si tenemos 50 routers y queremos añadir o quitar uno nuevo, habría que configurar todos los demás con la información del router nuevo de forma manual, lo que la haría la red poco escalable. En definitiva, se podría indicar que el enrutamiento dinámico se adapta de forma automática a los cambios de topología, pero el enrutamiento estático requiere intervención del administrador para ello.

El enrutamiento dinámico es menos seguro porque envía mensajes de actualización de forma continua con información de las distintas subredes. Estos pueden ser atacados, aunque existen medidas de seguridad y cifrados que pueden utilizarse para evitarlo. El hecho de enviar información por diferentes enlaces, igualmente, lo hace menos seguro. Sin embargo, el enrutamiento estático es más seguro porque las rutas nunca salen del router.

Las características o especificaciones técnicas de los dispositivos (routers) se tienen en cuenta para el enrutamiento dinámico, pero, en el caso del estático no porque el uso de estos es nulo.

Por último, la ruta elegida dependerá en el enrutamiento dinámico de la topología actual y en el enrutamiento estático siempre será la misma (prediciendo así siempre por donde va a ir el mensaje).

En el enrutamiento estático la tabla es configurada de forma manual y en el dinámico automática (por los protocolos de enrutamiento), esto hace que, si en el primero falla un enlace o nodo, el sistema no pueda recuperarse. El segundo, no tiene limitaciones de ningún tipo en ese aspecto.

En resumen, por un lado, hay que indicar que en el enrutamiento estático la configuración puede contener errores, especialmente si las redes son muy extensas, requiere la intervención del administrador en todo momento para mantener la información cambiante de cada una de las rutas, no se adapta fácilmente ni de forma automática a las redes en crecimiento y su mantenimiento se vuelve tan complicado que puede acabar siendo imposible.

Y, por otro lado, en el enrutamiento dinámico la función principal es la de conseguir información de las redes remotas para así, poder adaptarse de forma rápida cuando ocurra cualquier cambio en la topología de la red. El router se encargará de enviar y recibir mensajes de enrutamiento en cada una de sus interfaces, compartirá esta información con otros routers que usen el mismo protocolo y cuando detecten un cambio en la topología anunciará el cambio a cada uno de los routers existentes. Aunque al principio la red que tengamos sea pequeña, podemos empezar utilizando enrutamiento dinámico porque con el tiempo lo agradeceremos (el administrador tendrá menos trabajo en estas).