Visión general sobre Cloud Computing y AWS
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En este artículo vamos a tratar un nuevo modelo de consumo en la nube que está emergiendo con fuerza en los últimos tiempos, NaaS o Network as a Service.
La red es uno de los componentes más importantes en la actualidad, de ahí que los ingenieros tratemos de garantizar el tiempo de actividad y un buen rendimiento en todos los casos.
Tambén es cierto que esto se ha vuelto muy complicado debido a una gran cantidad de factores, como pueden ser el tener los recursos en múltiples nubes, o que el personal requiera conexión desde diferentes sitios o lugares.
Todo esto ha creado una presión sobre cómo están diseñadas e implementadas las redes dentro de nuestras organizaciones, a consecuencia de esto ha emergido un término llamado Network as a Service (NaaS).
Debido a que la transformación digital se ha acelerado exponencialmente en los últimos años y con esto, la optimización de los negocios se está convirtiendo en un objetivo estratégico, ha llevado a las organizaciones a migrar a la nube y a utilizar los diferentes servicios de consumo bajo demanda.
Es muy seguro que NaaS tendrá un fuerte impacto en el medio plazo, porque permitirá implementar rápidamente SaaS y PaaS en cualquier parte de la red.
Te invito a quedarte por acá, para que conozcas más acerca de este reciente modelo de consumo en la nube y, si una vez acabes de leer este artículo si te interesa saber más acerca de los otros modelos, te recomiendo leer el articulo IaaS vs PaaS vs SaaS: Qué son y cuál utilizar.
Es un modelo emergente de servicio en la nube que se basa en que los clientes rentan servicios de red a un tercero a través de suscripciones de gastos operativos (OpEx) de tal manera que reemplazan el enfoque tradicional centrado en hardware, con la finalidad de operar sus propias redes sin tener que mantener su propia infraestructura de red.
Las redes tradicionales además de requerir gastos de capital (CapEx) suelen ser rígidas y resistentes para adaptarse a las necesidades cambiantes, es por esto que el modelo NaaS permite a las empresas aprovechar la evolución de las redes hacia una infraestructura más ágil y dinámica.
Además, puede sustituir las redes privadas virtuales (VPN) y las conexiones de conmutación de etiquetas multi-protocolo (MPLS), también puede sustituir dispositivos firewalls y load balancers.
Primero hubo una nube enorme de gas y luego una gran explosión (Big Bang), estoy bromeando. Desde hace muchos años, la mayoría de las empresas configuraban su infraestructura de red, creando redes privadas y conectando sus instalaciones entre sí con enlaces alquilados a los proveedores de servicios de Internet (ISPs). No solo esto, debían configurar sus propias redes y cada sede necesitaba una serie de dispositivos físicos, incluidos conmutadores, enrutadores, firewalls y más. Además, necesitaban comunicarse entre sus sedes mediante diferentes protocolos de red, uno de los más utilizados es MPLS.
Sin embargo, con el paso del tiempo, las redes definidas por software (SD-WAN) se hicieron muy populares y esto se convirtió en el predecesor de NaaS. Luego entró en escena los NFV (Network Functions Virtualization) los cuales hacen uso de software en lugar de dispositivos físicos para realizar funciones de red. Con esto queda claro que se podrían efectuar diferentes configuraciones empleando únicamente software para el manejo de redes.
Debo aclarar que no todas las configuraciones de NaaS son virtuales. De hecho, podemos usar un proveedor de NaaS para obtener dispositivos de red físicos, pero en lugar de comprarlos, los rentamos.
Las características más importantes son las siguientes:
El interés por este modelo es cada vez mayor, y en algunos años será evidente el uso de este, pero debido a que es un modelo reciente, las compañías se enfrentan a varios obstáculos para poder desplegarlo, entre ellos están:
Además, hay otras causas que ralentizan la adopción de este modelo, como es que la oferta de los proveedores todavía es escasa, esto supone una dificultad a la hora de que las empresas accedan al mismo.
Otra causa es el simple hecho de que estemos acostumbrados a que los dispositivos de red se desplieguen en local, esto hace que todavía las organizaciones lo vean como un impedimento al plantearse su consumo como servicio.
Este modelo funciona ofreciendo a las organizaciones servicios de red para que no tengan que invertir en mantenimiento y compra de dispositivos físicos. El cliente únicamente debe pagar una suscripción mensual, solo tendría que conectarse a Internet e iniciar sesión en un navegador, y podría acceder a todos los servicios que necesite.
El proveedor tiene dos opciones para ofrecer, como son:
Ejemplos sencillos del uso de NaaS:
Estos son algunos ejemplos, con lo que respecta a la red, existen infinidad de cosas que se pueden realizar e implementar.
Primero que todo, SASE (Secure Access Service Edge) es una arquitectura de red que unifica las soluciones de red y seguridad en un servicio basado en la nube para mejorar la accesibilidad, la eficiencia y la ciberseguridad.
El objetivo de SASE es proporcionar seguridad a aplicaciones y datos, sin importar donde las usen los usuarios, lo que lo hace ideal para NaaS. En pocas palabras, nuestro proveedor de NaaS puede proteger aplicaciones sin comprometer el rendimiento.
Brindar acceso seguro a aplicaciones y datos o plataformas en la nube como Azure, AWS, Google Cloud o proveedores de basados en identidad. SASE es el futuro de las redes seguras, es por eso que las empresas han puesto su mirada en él y es hacia donde nos dirigimos.
NaaS es un modelo reciente, y con el pasar de los años va a desempeñar un papel fundamental, puesto que aporta un elemento diferencial frente al modelo tradicional. Las empresas que se queden atrás y no sean capaces de sacar el máximo valor de su red optando por este modelo, quizás la competencia lo haga y posiblemente les aventaje en términos de tecnología y de negocio.
La adopción del modelo NaaS todavía genera ciertas dudas, pasa porque las empresas entiendan las implicaciones y los beneficios que les aportará. Estos temores son los mismos que hace años afectaron a la hora de migrar los servicios de las empresas a la nube.
Si bien NaaS no es sencillo de implementar, de hecho, resulta muy complicado ejecutar NaaS en paralelo con las redes existentes, para esto se deben establecer expectativas reales, ya que puede haber contratiempos en los servicios o disponibilidad.
Lo importante es que este modelo ya es una realidad, y las empresas deberían de ir analizándolo con vistas de mejorar y crecer su negocio.
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