Management

Sabemos que las empresas IT están a la vanguardia de la innovación. En teoría, ellas son las que están a la cabeza de todas las cosas que se necesitan para obtener buenos resultados. Esto no solamente en referencia a los números, sino también a la propia satisfacción de los colaboradores.

Sin embargo, ni siquiera ellos están exentos de que puedan ocurrir problemas en relación con los sesgos. Ahora bien, ¿qué significa sesgo? Podemos definirlo como una limitación de la visión de una persona o un grupo de personas con respecto a un tema. Es decir, se trata de algo que impide acceder a la realidad.

Sesgos que pueden estar en tu empresa IT

En este sentido, existen distintos tipos de sesgos, pero aquí hablaremos de los principales que existen en las empresas IT. En caso de que lo quieras saber, aquí te explicaremos todo lo que debes tener en cuenta. ¡Te aseguramos que habrá un antes y un después en tu organización después de implementar los cambios!

Es mejor ser conservador que innovador

Una de las principales cuestiones que debes tener en cuenta. A la hora de pensar en los desarrollos IT, es posible que quieras asumir una actitud conservadora. Esto se puede apreciar a la hora de elegir los proyectos de tus clientes: si te especializas en una determinada área, puede que automáticamente se convierta en tu zona de confort.

Sin embargo, mucho cuidado: la zona de confort se puede transformar en una gran resistencia para el crecimiento de tu empresa. El hecho de que te especialices en algo no significa que te debas dedicar únicamente a una sola cosa, ya que eso sería asumir una actitud conservadora y casi automatizada con respecto a los trabajos.

Esta visión se corresponde con las estructuras antiguas del empleo, donde los trabajadores realizaban actividades estandarizadas para una cadena de fabricación de productos idénticos. Sin embargo, sabemos que el desarrollo de software implica una personalización importante, ya que no hay dos empresas iguales.

Por ende, siempre deberás apostar por la innovación. ¿Esto significa que debas desmantelar todo lo conseguido anteriormente? En lo absoluto. Puedes mantener una misma estructura de trabajo, con una metodología que te permita cumplir con tus objetivos a un ritmo que puedas llevar sin inconvenientes.

No obstante, cuando sientas que esto ya es algo idéntico a lo que has realizado en el pasado, simplemente debes evaluar si es el método correcto. Al fin y al cabo, los clientes exigen calidad y tú debes estar a la vanguardia para innovar en soluciones creativas y eficientes para resolver todas sus necesidades.

Hay que priorizar la cantidad antes que la calidad

Este es otro de los problemas que tienen algunas empresas IT. Básicamente, creen que, al tomar cada vez más clientes, podrán tener mejores ingresos. A la vez, esos ingresos van a significar un crecimiento de la compañía. Si bien esto puede ser cierto, ¿estarías dispuesto a conseguirlo con una disminución de la calidad?

Supongamos que tienes un equipo de 30 trabajadores. Como una generalización, imagina que tardas 2 meses en el desarrollo de un trabajo completo para un cliente, pero realizándolo full-time. Ahora bien, si tomas 2 clientes, pero mantienes la misma cantidad de trabajadores, será imposible mantener una calidad de servicio idéntica.

Básicamente, ahora tardarás 4 meses para finalizar ambos proyectos, pues son 2 meses por cada uno. Sin embargo, ¿qué ocurriría si aligerases la carga de trabajo? Pues, en ese caso, podrías creer que eres capaz de completar un desarrollo de software antes de tiempo. Supongamos que logras reducir a la mitad esa carga horaria: en ese caso, podrás hacer 2 trabajos en 2 meses (un mes por cada uno).

Entonces, estarás ganando el doble de dinero. Sin embargo, ¿vale la pena? Es probable que un desarrollo apresurado pueda conllevar muchos problemas de desarrollo. Incluso, podrías tardar más tiempo en corregir todos los fallos que habiendo hecho un óptimo trabajo inicial, pero eso no es todo.

Si entregas software defectuoso, posiblemente tu reputación se irá a pique. Entonces, bien puede que consigas dos clientes, habrá que ver si ellos te recomiendan a sus pares. Incluso, si tu trabajo es muy accidentado, es posible que tengas una imagen tan negativa que ninguna otra compañía pueda volver a confiar en ti.

Por eso, si quieres tomar más trabajos, deberás invertir en nuevos trabajadores, herramientas y recursos para cumplir en tiempo y forma con cada proyecto. Así, es aconsejable que tengas que volverte muy selectivo con tus clientes en un primer momento, para evitar cualquier clase de complicaciones.

Los programadores son la pieza más importante

Sí, sabemos que probablemente ellos son los que perciban más salario. Del mismo modo, ellos se encargan de hacer realidad muchas de las ideas que los clientes necesitan. Sin embargo, ¿es correcto delegar todas las responsabilidades a ellos? Incluso, ¿es saludable que no existan otros especialistas, de distintas categorías, para supervisar el proyecto?

Pues bien, este es un grave error. Si bien tu empresa se especializa en recursos IT, es sugerible que otros profesionales deben contemplar las áreas de tu proyecto. Tomemos el caso del desarrollo de una aplicación para un supermercado, que quiere generar una tienda para adquirir productos a través del smartphone.

Luego de varias reuniones, ellos te comentan qué es lo que quieren hacer con la implementación del software. Tú les transmites esas ideas a los programadores y ellos empiezan a utilizar líneas de código para el desarrollo. Sin embargo, ¿ellos saben cómo funciona la mentalidad del cliente?

Pues el equipo de marketing puede aportar una visión comercial para que los programadores tomen decisiones en el desarrollo IT. A su vez, un equipo de UX podrá entender la mejor forma de mejorar la estética y la usabilidad del servicio, con el objetivo de que pueda ser más exitoso a la hora de usarlo.

También podrías necesitar de un equipo de publicidad, para promocionar el funcionamiento del nuevo servicio y que llegue a los clientes. A su vez, un equipo contable deberá supervisar cada desarrollo, para evaluar que nada se salga del presupuesto. Como ves, los programadores son una pieza clave, pero no la única en tus desarrollos IT.

Las capacitaciones no son una inversión innecesaria

Podrías creer que tus colaboradores están muy capacitados. Al fin y al cabo, fueron contratados por tu empresa debido a sus habilidades, conocimiento y trayectoria. Sin embargo, no tienes en cuenta una cuestión: la capacitación del mundo IT se ha vuelto absolutamente necesaria.

Esto es algo que no todas las personas tienen en cuenta, pero tiene una explicación simple. Constantemente, las tecnologías evolucionan a un ritmo increíble, por lo que incluso los trabajadores más calificados podrían no ser funcionales con un determinado lenguaje o software en caso de no actualizar sus competencias.

Como ellos estarán ocupados en las responsabilidades del día a día, las capacitaciones deberían correr por cuenta de la empresa. El problema es que no todos los empleadores lo consideran como una inversión, pues creen que el hecho de gastar dinero en cursos para los empleados significará que ellos se irán de la empresa y conseguirán otro trabajo.

Puedes evitar este sesgo y pensarlo de otra forma, que es cómo nutrirá esta incorporación de conocimientos a tu día a día. Si tienes trabajadores más calificados, ellos estarán más satisfechos con la visión general de la compañía. A su vez, estarán preparados para afrontar nuevos desafíos empresariales.

Por ejemplo, si te busca una compañía que quiere un desarrollo de software innovador, podrías encontrarte con la noticia de que tus empleados no dan la talla. Ellos no tienen la culpa, pues los has contratado para asumir distintas responsabilidades. No obstante, si el mercado pide unas nuevas, deberías permitir que ellos las aprendan.

Así, podrás asumir nuevos proyectos de una mayor calidad. Si son capacitaciones sobre desarrollos modernos (como nuevos lenguajes), seguramente serán mucho mejor valorados, tanto en reputación como en precio. Por ende, también significará que los empleados tendrán mayores probabilidades de conseguir buenos resultados en sus servicios.

Un ambiente distendido genera una baja productividad

Es otro de los sesgos que se dan en las empresas IT. Muchos de los trabajadores suelen querer descontracturarse de tantas obligaciones y generan reuniones dentro de la oficina. Incluso, muchos se acostumbran a charlar, escuchar música, nutrirse con podcasts, vídeos de YouTube o cualquier otro recurso que los ayude a relajarse.

Sin embargo, podrías creer que esto no es algo aceptable para los cánones de tu compañía. Pues este problema de visión es bastante común, especialmente para aquellos que todavía no se han adaptado a todas las bondades que supone Internet. Y esto radica en un inconveniente de perspectiva, que no es otro que creer que es posible abstraerse completamente de la red.

Es decir, el hecho de trabajar con una computadora ya significa tener a mano un sinfín de recursos para entretenerse, por lo que resulta imposible prohibirlos. Más bien, parece conveniente utilizar estos recursos para mejorar el rendimiento. Ahora bien, ¿cómo mejorar la productividad con diversión?.

Si te lo pones a pensar, cualquier trabajador del área IT necesita estar lúcido para afrontar todos sus desafíos empresariales. Si ellos están estresados y no encuentran momentos para divertirse, es posible que no sean capaces de trabajar al máximo nivel. Por lo tanto, es clave que el espacio de trabajo tenga opciones para que ellos puedan tomarse un descanso o relajarse.

Incluso, tú podrías ser el artífice de un mejor espacio para trabajar. Como líder de la organización, puedes proponer espacios para el divertimiento. Esto lo realizan en Google, donde los empleados tienen mesas de ping pong o lugares para probar distintos videojuegos, por ejemplo.

Lo importante es que cultives el sentido de la responsabilidad en todos los colaboradores. Esto significa que, por más que tengan a mano muchos recursos disponibles, los utilicen con criterio. Al fin y al cabo, lo importante es que pueda existir un desarrollo IT que satisfaga tanto a los líderes del departamento como al cliente final.

La inteligencia artificial es una enemiga

Este es otro de los sesgos más comunes, pero tiene su explicación: muchos líderes IT le tienen miedo a lo desconocidos. Y, justamente, se conoce poco sobre la inteligencia artificial, especialmente en cuanto a su futuro en el trabajo y sus aplicaciones actuales. Por ejemplo, podemos ver distintos asistentes de código que pueden ayudar a los programadores y se genera el miedo de que eventualmente los reemplazarán.

Por eso, lo cierto es que los líderes de empresas IT no confían en este funcionamiento y piensan que afectará al desarrollo final de un servicio o que el cliente no aceptará un trabajo con máquinas de por medio. La clave para vencer este prejuicio es que, en todos los casos, la máquina solo ayudará y no tomará resoluciones finales.

¿Qué significa esto? Que la inteligencia artificial permite ayudar a los colaboradores de tu empresa, pero nunca les quitará trabajo a ellos. Es decir, siempre será un ser humano capacitado tendrá que ser quien dé las indicaciones a las máquinas, por lo que podrías considerarlas como “compañeras de trabajo” de tus colaboradores.

Por lo tanto, la inteligencia artificial puede ser un gran complemento para aliviar la carga de los trabajadores. Por ejemplo, se pueden encargar de todas aquellas tareas consideradas como “repetitivas”, motivo por el cual puede ser una gran alternativa para incorporar en tus futuros desarrollos.

Hay que obedecer al cliente y no discutir con él

Por último, se trata de los sesgos más comunes, no solamente en la industria IT, sino también en todas las empresas en general. Si bien es verdad que el cliente es el que pagará por el producto final, es importante no tener miedo para confrontar con él. Cuando hablamos de confrontación no hacemos referencia a peleas, sino a intercambios de puntos de vista.

¿Qué implica esto? Pues muy simple: que, en ocasiones, las cosas que pida el cliente no se pueden materializar de forma simple. Para esto, es fundamental que pueda haber una buena comunicación entre ambas partes, con el objetivo de evitar problemas o pedidos que no estaban contemplados inicialmente.

Del mismo modo, es importante que puedan hablar como pares para encontrar la mejor solución posible a los desarrollos. Por ejemplo, si hay algo que no puedes realizar, es preferible que lo discutas para que encuentren una alternativa en conjunto. Incluso, si opinas que algo está mal o no es aconsejable, es preferible mencionárselo.

Al fin y al cabo, el cliente confía en tu capacidad de desarrollo IT. Por lo tanto, tu visión como profesional debe armonizarse con su perspectiva comercial, para que el producto final tenga el mejor resultado posible. Si eliminas este sesgo, te darás cuenta de que podrás obtener una mayor tasa de éxito en tus proyectos.

En definitiva, has visto que existen muchos sesgos en las industrias IT. ¡Esperamos que esta información te haya servido para que los soluciones y maximices toda tu productividad!