Reclutamiento 4.0: Revolucionando la captación de talento
Conoce más sobre qué significa Reclutamiento 4.0 y cómo ha ido evolucionando la forma en la que las empresas atraen a sus...
¿Quieres ser un buen recruiter IT? En este artículo nos centramos en las funciones de este perfil y los conocimientos que debe tener para desempeñarlas.
En este artículo veremos las características que darán valor a los recruiters especializados en el sector IT, y además algunos ejemplos de perfiles muy demandados en el mercado.
Si quieres especializarte o conocer más de cerca la selección de este tipo de perfiles, no lo dudes y ¡sigue leyendo!
IT, Information Technology, o en castellano: tecnología de la información.
Los perfiles IT son aquellos encargados de gestionar la información en las empresas, para ello se encargan de plantear, programar, construir y crear toda la infraestructura necesaria para almacenar dicha cantidad de datos.
Hoy en día, sin darnos cuenta, estamos rodeados de tecnología, pero para que todo eso funcione, y lo haga correctamente, existen personas especialistas que se encargan de ello. Ya son muchas las empresas que cuentan ya con un Departamento de Tecnología, y puede que algún amigo o conocido nos haya contado que trabaja como “desarrollador de software”, de “aplicaciones móviles”, “de videojuegos” o, por ejemplo, que hace los diseños de las webs o aplicaciones que habitualmente utilizamos en nuestro día a día. Ellos forman parte del sector IT y seguramente no les falte trabajo, debido a la gran demanda de personas cualificadas para estos tipos de empleo.
El principal problema en el que nos vemos inmersos es que aún no hay muchas personas que cuenten con estas capacidades, o por lo menos no las suficientes, ya que en el mercado hay una gran demanda. Cada día hay más formación y aprendizaje en este ámbito, y con ello más personas que se muestran interesadas en desarrollar habilidades y recibir formación sobre los conocimientos técnicos necesarios para trabajar en el sector. Normalmente, este tipo de perfiles desarrolla tareas complejas con gran necesidad de análisis, lógica y minucia. Debido a la gran demanda en el mercado, las empresas tienen que volcar todos sus esfuerzos no sólo en encontrar el perfil IT adecuado, sino también en la satisfacción de este tipo de empleados, ya que es un sector con una tasa de rotación muy elevada.
Normalmente los “recruiters” (termino que tomamos del inglés y hace referencia a las personas, especialistas en Recursos Humanos, que se dedican principalmente a identificar y atraer a futuros empleados) suelen estar especializados en un área o tecnología concreta dentro del sector IT y se encargan de dar soporte a las compañías captando este tipo de talento, atrayéndolo e incluyéndolo en sus equipos.
Si quieres llegar a ser el mejor recruiter IT y, hasta ahora, tu conocimiento en cuanto a tecnología era limitado, tengo que decirte que tendrás que “ponerte las pilas” para comprender todo lo que hay detrás de una web, una aplicación móvil, un videojuego o una máquina. Términos como “testing”,”API”, “base de datos”, “framework”, “backend” o “frontend” pasarán a ser tus nuevos compañeros del día a día y entenderlos será una de las claves de tu éxito.
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Si te estás preguntando “¿qué hace un IT recruiter?”, podríamos dividir sus tareas en varias fases:
Definición de puestos de trabajo. El IT recruiter será la persona que entienda tanto las necesidades y requerimientos del puesto de trabajo por parte de la empresa (job description), deberá incluir toda la información relativa a las tareas a realizar, tiempo de experiencia, conocimiento de idiomas, tecnologías a utilizar, rango salarial de la oferta y previsión estimada de la fecha de incorporación al puesto de trabajo. Será también quien tendrá la primera entrevista con los candidatos que se interesan en el empleo, por lo que deberá encontrar el punto en el que todo vaya a encajar. Esto sólo pasa si la definición del puesto de trabajo la tenemos clara y sabemos expresarla, tanto en la oferta de empleo como en la entrevista, de una forma cercana y accesible a los candidatos.
Publicación de ofertas de empleo y búsqueda pasiva de candidatos. Tras la definición correcta del puesto de trabajo, llega el momento de buscar candidatos que se ajusten al perfil. Podremos hacerlo de forma activa: buscar en nuestra base de datos perfiles que estén interesados en un cambio o en bases de datos de algunos portales de empleo (por ejemplo, herramientas como LinkedIn o Infojobs, en sus subscripciones premium, permiten a los recruiter ver quién está en búsqueda de empleo sin que aparezca en su perfil público) y contactar directamente con ellos sin saber realmente si están interesados, o también de forma pasiva: publicando ofertas en distintos portales de empleo, redes sociales, herramientas de búsqueda de personas especializadas o de forma interna compartiendo las ofertas con los propios empleados de la compañía creando un apartado de “perfiles referenciados”. Una vez hecho todo este trabajo, deberemos cribar y filtrar los candidatos que se han inscrito en las ofertas y aquellos que han respondido a nuestras llamadas o mensajes para realmente tener claro quiénes serán los que cumplen con el perfil que buscamos. Si no llevamos a cabo correctamente este paso de “filtro” de candidatos, perderemos mucho tiempo realizando entrevistas a personas que no encajan en el perfil, además de hacerles perder el teimpo a ellos y darles “falsas esperanzas”.
Referencia de la empresa frente a los candidatos. El recruiter suele ser la primera persona con la que tenemos contacto al interesarnos por un proceso de selección dentro de una compañía, por lo que servirá como cara visible de la empresa frente a los futuros empleados y como decía Oscar Wilde: “No hay una segunda oportunidad para una primera impresión”. La primera llamada que hagamos a un candidato será fundamental para nuestro éxito futuro durante el proceso completo, ya que, si de primeras causamos mala imagen, el candidato declinará seguir en el proceso para nuestra empresa y, con lo que cuesta encontrar este tipo de perfiles, no es lo que nos interesa.
En muchas ocasiones el IT recruiter hará la primera criba de candidatos, involucrándose en gran parte en compartir y conocer los valores de la compañía y las competencias personales de los candidatos y pasando a una segunda entrevista, si así lo considera, con el responsable tecnológico para revisar más en profundidad aquellos aspectos técnicos necesarios para ocupar el puesto.
Atracción y retención de talento. Conocer y analizar el mercado, a los trabajadores y sus necesidades y estar al tanto de cualquier novedad que, por ejemplo, puedan ofrecer empresas de la competencia será una tarea muy importante para el éxito de un buen recruiter IT, ya que le servirá para adelantarse y tomar medidas que pongan a su empresa en el top como empleadora en el sector IT. Todo el trabajo anterior no servirá de nada si no somos una empresa que resulte atractiva para los candidatos, por lo que será muy importante mantenerse siempre al día.
Oferta de incorporación y documento de precontratación. Una vez decidido el candidato o candidatos seleccionados para incorporarse a la compañía y con el fin de conocer si aceptan la propuesta, llega el momento de exponer todas las condiciones al candidato (salario, aspectos relativos al salario emocional como el teletrabajo o la flexibilidad compatible con el puesto y cualquier otro beneficio que aporte valor a nuestra oferta). En caso de que nuestra propuesta cumpla con los requisitos que el candidato valora para involucrarse en el proyecto se deberá de poner en marcha el proceso de onboarding en la compañía. Si quieres conocer más acerca de este proceso, te invito a leer el artículo que escribí hace unos meses: Procesos de onboarding eficaces en equipos IT.
Detectar fuentes de reclutamiento alternativas. Acudir a ferias de empleo, tener contacto con Universidades o accesos corporativos a redes sociales que estén más orientadas a un público de edad más joven pueden resultar de gran interés a la hora de reclutar perfiles menos experimentados. Así mismo, acudir a eventos o charlas orientadas a profesionales del sector, así como hacerles llegar a nuestros compañeros del sector las diferentes ofertas de empleo que publicamos resultará interesante para perfiles de mayor experiencia.
Comparto también otro artículo en el que podrás encontrar Consejos para mejorar el proceso de selección de perfiles IT.
Para poder llevar a cabo un buen trabajo, será necesario que los recruiters que se especializan en el sector IT estén al día en cuanto a información de actualidad en el sector se refiere. Destacamos diferentes términos que serán básicos para poder ir teniendo más conocimiento del sector y que nos ayudarán a entender el día a día de los trabajadores que buscamos reclutar.
Los lenguajes de programación son la estructura que se encarga de conseguir el comportamiento lógico de un programa. Se caracterizan por tener una base sintáctica y semántica conocida. Que un desarrollador tenga conocimientos de un lenguaje le permite dar instrucciones lógicas o secuencias ordenadas para que el ordenador, tablet, móvil, etc., sepa lo que el usuario quiere hacer. Existen multitud de lenguajes de programación que se utilizarán en función del objetivo a cumplir en nuestra aplicación.
Los frameworks son conjuntos de conceptos estándar basados en una tecnología que sirve como referencia y que facilita aún más la solución de problemas que puedan surgir en programación. Además, también suelen ser más agiles que los propios lenguajes puros.
El servidor será el software compuesto por un grupo de máquinas que atenderán las peticiones de uno o varios clientes (otros programas) devolviendo una respuesta, es el encargado de garantizar que la comunicación entre servidor y cliente sea segura y sin fallos. En el caso de que la infraestructura sea en la nube se denomina Servidor Cloud.
La fachada de servicios o API (Application Programming Interface) es el conjunto de servicios web formulados mediante algoritmos a los que se accede de forma remota, es decir, no se consumen desde un propio sitio web si no que se conecta y se consume la información utilizando una conexión remota, por ejemplo, una aplicación móvil conecta a un servicio web para poder acceder a la misma información que está alojada en un software backend. Podrán ser en formato JSon (Restful) o XML (Soap).
La base de datos es el software que se encarga de almacenar y proporcionar los datos a cualquier otro software Existen dos tipos de bases de datos:
Desarrollador backend y frontend. Son perfiles altamente demandados en el mercado IT, que se encargan de realizar tanto la parte “lógica” como la parte “visual” de una web.
El backend es el software, que va generalmente alojado en un servidor, y que integra todas las funcionalidades. Generalmente, se entiende como desarrollador backend al encargado de desarrollar las funcionalidades de gestión de tablas de datos (listar, agregar, editar, eliminar) y toda la capa de información que no vemos como usuarios pero que contiene toda la lógica y el sentido del uso que se le da. Es la parte que se conecta con la base de datos y el servidor.
Destacan numerosos lenguajes, y se utilizará uno u otro en función del tipo del proyecto, características técnicas, sostenibilidad, etc. Dentro de cada lenguaje existen frameworks específicos:
El frontend es el software, que también está generalmente alojado en un servidor, y se desarrolla para la visualización y ejecución de funcionalidades. Es decir, la parte “bonita” que vemos como usuarios en una web. Tambien existen diferentes lenguajes y frameworks de desarrollo frontend:
El término responsive hace referencia a la adaptación de un sitio web siguiendo el principio Mobile First, es decir, la creación de una web con la intención de que al acceder a ella desde un dispositivo móvil, tablet, etc. se transforme o adapte tanto en su visualización (resolución) como en el contenido que se muestra.
El desarrollo mobile es aquel que está destinado a utilizarse en dispositivos inalambricos: teléfonos, táblets, etc. El conjunto de procesos y procedimientos que conlleva la escritura de este tipo de lenguajes es similar al desarrollo de aplicaciones web, aunque con algunas particularidades. Se suele diferenciar entre aplicaciones nativas o híbridas:
Aplicaciones nativas son las que se desarrollan de manera independiente teniendo en cuenta la plataforma en la que se van a utilizar (Android, iOS, Windows…). Ejemplos de lenguajes nativos serían ObjectiveC o Swift en dispositivos iOS y Java o Kotlin en aquellos Android.
Aplicaciones híbridas son aquellas que se desarrollan en un único lenguaje de programación pero que sirven para diferentes plataformas. Como ejemplos de lenguajes de programación híbrido podríamos decir Ionic, Xamarin o React Native.
Las aplicaciones móviles serán iOS, Android, Windows… dependiendo del sistema operativo del equipo, aunque las dos primeras suelen ser las más habituales. Las principales diferencias son a nivel técnico, pero también el propio diseño del equipo hará que los lenguajes tengan notables diferencias. Es decir, una persona que se dedique al desarrollo de aplicaciones móviles destinada a equipos Android no tiene por qué tener los conocimientos necesarios para desarrollar una aplicación móvil para iOS o una aplicación con lenguaje híbrido.
Existen muchos otros términos que deberás ir conociendo. Leer, estar informado, acudir a charlas formales o informales acerca de tecnología, o simplemente tomarte un café con un compañero que pertenezca al Departamento Técnico y que esté dispuesto a escuchar tus dudas y ayudarte son los mejores consejos que puedo darte para que consigas llegar a ser ¡el mejor RECRUITER IT del mundo!
Y si. además, aún sigues interesado en saber más acerca del mundo de reclutamiento de perfiles IT, te comparto un curso que puede resultarte interesante para llegar a profundizar más en conceptos habituales que deberás conocer: Curso de Conceptos clave del mundo IT.
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